La cantante estadounidense murió este miércoles a sus 76 años tras una increíble carrera musical. A lo largo de su vida, se ganó el amor y el respeto de millones de personas; no en vano era considerada uno de los mayores tesoros nacionales de Estados Unidos. Durante su época de éxitos indelebles a finales de los sesenta, Aretha Franklin cambió el rumbo de la música góspel hacia algo mucho más romántico y su single “Respect” se convirtió en su firma.